En el marco del cierre del semestre académico, Patricio Valladares (Kinesiólogo y Magíster en Medicina Deportiva) fue invitado al Campus Viña del Mar por la Dirección de Asuntos Estudiantiles -enmarcado en la Campaña de DAE y CADE #HablemosDeHábitosSaludables- para entregar algunos consejos a las y los estudiantes que buscan dedicarse al mundo del deporte y, también, para enfrentar de mejor forma el día a día.
La sesión tuvo como objetivo concientizar sobre la importancia del cuidado del cuerpo a la hora de enfrentarse a alguna rutina deportiva y cómo afrontar dolencias que afloran luego de realizado el trabajo físico.
“No dependan de un kinesiólogo para hacer masajes. Pueden usar un rodillo o barra de automasaje, una pelota de tenis e, incluso, la cuchara de palo de la cocina te sirve para soltar las contracturas”, comenta Valladares.
Además, afirma que cada persona puede detectar la zona afectada luego de un mal trabajo físico o un movimiento deficiente de técnica. Asegura que, si se siente dolor, es el sector que se debe trabajar con los elementos que recomendaba.
“A veces uno termina adolorido después de las prácticas y sigue exigiéndose, pero el cuerpo pide pausas. Es bueno saber esto, porque uno está acostumbrado a hacer deporte y no encontrar razones de porqué terminamos mal”, comenta Diego Chicano, estudiante de segundo año de Periodismo y asistente a la charla.
Asimismo, Franco Boassi, estudiante de primer año de Ingeniería Comercial comenta lo abordado en la presentación del kinesiólogo: “Es algo fundamental para todos quienes practicamos deportes. Todos sabemos que las lesiones son malas, pero dejamos pasar este tipo de situaciones. Además, dio hartas herramientas sencillas de aplicar y eso fue lo mejor de la charla, no se quedó solo en la teoría”.
Dentro de las recomendaciones finales, el profesional asegura que es prudente darse ciertas recompensas o vacaciones luego de un periodo de alto rendimiento físico.
El expositor destaca la importancia, además, de que todo el proceso de actividad intensiva sea acompañado o guiado por profesionales del área. Y, en cuanto a la ingesta de agua, es necesario medir la proporción en base al peso corporal y la actividad que se está realizando.
Asimismo, es de suma relevancia – dice – el cambio de mentalidad. No es solo un cambio físico, algo externo, sino que debe ir acompañado por un proceso psicológico que haga entender al cuerpo qué es lo que se está realizando y por qué lo están haciendo.