Disfruta realizar deporte, principalmente jugar Pádel al menos una vez a la semana. No tiene un vasto tiempo libre, pero organiza sus actividades para cumplir con todos sus intereses. Así se describe Joaquín García, el nuevo presidente de la Federación de Estudiantes 2022 de la Universidad Adolfo Ibáñez Campus Viña del Mar.
La motivación de García por presidir la lista Sigamos Creciendo -formada por 46 estudiantes- fue “la vida universitaria que he tenido a lo largo de estos tres años, la cual ha sido un poco truncada por la pandemia. Me gustaría que toda la comunidad pueda sentir la Universidad como una segunda casa, no como un lugar que sirve sólo para estudiar, sino que tengan la oportunidad de formar un buen nicho de amistades y tener experiencias que sirvan para el resto de su vida”, reflexiona.
Además, el alumno identifica la necesidad de “retomar la vida universitaria en el campus, dejando poco a poco esa idea de ‘cuadradito negro’ de zoom para poder reencontrarnos cara a cara en actividades de distintas características y temáticas”.
La invitación que realiza el estudiante de tercer año de Derecho es “a participar, a ser parte de la Universidad y no quedarse como espectadores. La UAI es un espacio lleno de ideas, sueños y talentos distintos y nos gustaría que por medio de la FEUAI todos y todas tengan un espacio para ir potenciando esos aspectos diferentes”.
Las propuestas de la FEUAI 2022 se enfocan en generar espacios de reencuentro en la comunidad, tales como la feria de stands multicultural. “La iniciativa consiste en visibilizar las costumbres de distintos países y pueblos originarios, la idea es que toda la comunidad se organice para participar para mostrar juegos típicos, comidas, vestuario, etc. Se premiará al stand más motivado al terminar la jornada”, precisa García.
Además, el equipo cuenta con el proyecto StudyRoom que pretende facilitar y motivar el estudio individual y silencioso con otras personas que estén en la misma situación. Sumado a ello, la FEUAI 2022 quiere ser parte de la ciudad y contribuir, por ejemplo, con una limpieza comunitaria para evitar micro basurales y prevenir accidentes.
“Lo que nos unió como equipo fue el trabajo. A todos/as nos movía el querer impactar positivamente en la comunidad y mientras trabajábamos nos dimos cuenta que todo fluía súper bien, nos pudimos adaptar e intercambiar ideas desde distintas áreas porque todos estudiamos cosas distintas. Eso nos permitió también conocernos y crear un vínculo”, ahonda el presidente.