El escritor y dramaturgo alemán, Bertolt Brecht, escribió hace casi 100 años la comedia “Ópera por tres centavos”, que trata tópicos como la corrupción, la riqueza desmedida, el amor ciego, la infidelidad, los intereses políticos y la indigencia. La obra tuvo un éxito rotundo en la Europa victoriana, y lo mismo sucedió este pasado 20, 21 y 22 de octubre en el auditorio del campus Viña del Mar de la Universidad Adolfo Ibáñez.
La primera compañía de teatro de la universidad -integrada por 19 estudiantes pertenecientes a las distintas carreras de la casa de estudios- representó la sátira con una gran calidad actoral, transportando los locos años 20 al escenario, con adaptaciones musicales que pertenecieron a la producción original, y que fueron complementadas con bailes y una dinámica puesta en escena.
Todo esto sucedió gracias a la producción y dirección de la actriz y profesora, Isidora Palma, quien los y las instruyó en artes escénicas en un “tiempo record”, como ella misma recalcó, para que así los y las estudiantes fuesen capaces de poner en práctica sus virtudes actorales, y que pudiesen comprender la contemporaneidad de las temáticas abordadas, junto con las disimilitudes de una época histórica distante a la actual.
Ante un auditorio repleto de espectadores, las y los universitarios se despojaron de sus identidades reales y vistieron de estilo charlestón, con plumas, lentejuelas y objetos propios del art decó, logrando así interpretar con gran similitud a los histriónicos personajes de Brecht.
Asimismo, la profesora resaltó el compromiso de su equipo y el gran trabajo detrás de escena que se desarrolló durante los dos meses de ensayos previos. Además, comentó que: “Esta obra es muy colectiva, si falta uno no funciona (…) El gran aprendizaje es entender que en el teatro no hay personajes grandes ni pequeños, sino que son todos muy importantes y perfectos”.
Por su parte, el elenco se mostró emocionado al finalizar el espectáculo. Verena Bernal, quién fue la encargada de personificar a “Lucy”, uno de los romances de “Mackie el Cuchillero”, comentó: “Estábamos un poco preocupados porque el ensayo general no había salido tan bien. Sin embargo, la obra salió espectacular. En verdad se notó que hubo ánimo, energía, ganas. Todo salió increíble. Estamos muy contentos”.
Además, Andrés Kalaesis, quien encarnó al “Señor Peachum”, antagonista y padre de “Polly”, la esposa de “Macheath”, expresó: “Llevamos ensayando la obra en sí, desde el segundo semestre. Hemos trabajado con Isidora, con Iván, que son especialistas en cada uno de sus rubros y ha sido espectacular. Me he sentido como un actor profesional (…) Creo que hicimos un muy buen trabajo”.
La producción también estuvo a cargo de Iván Aedo, director musical, quien fue el responsable de adaptar las partituras originales de la obra, compuestas por el compositor alemán, Kurt Weill, al mundo escénico de la representación. Por otro lado, el trabajo estético, de vestuario, escenográfico y de utilería, fue liderado por Constanza Estela Figueroa, diseñadora integral, y Flavia Salinas, asistente de diseño.
El éxito de la velada se manifestó en las reacciones del público, que dieron cuenta del gran compromiso y profesionalismo de las y los jóvenes. Entre carcajadas, aplausos y ovaciones, se desarrollaron las tres fechas en las que se presentó la sátira. Algunas de las frases usadas por los espectadores para referirse a la función fueron: Excepcional, fuera de serie, espectacular, inclusiva, actual.
Tras este gran recibimiento por parte de la audiencia, la Compañía de Teatro UAI cerró sus presentaciones en el auditorio de la universidad, dando paso a las próximas generaciones de estudiantes que quieran integrarse, aprender de técnicas actorales y herramientas de expresión que aporten tanto a su vida personal como a su futuro laboral.