Amante de la naturaleza y muy honesta, así se define Andrea Villavicencio (23), estudiante de 5º año de Ingeniería Civil en Energía y Medio Ambiente de la Universidad Adolfo Ibáñez Campus Viña del Mar. Se trata de una de las 10 chilenas y chilenos seleccionados para participar en el programa Winds of Change de la Universidad de Otago en Nueva Zelanda, el cual pretende educar a futuros líderes en los impactos del cambio climático y establecer una red colaborativa binacional en la que se presentarán trabajos de investigación en conjunto.
En 2017, Villavicencio formó parte del Centro de Estudiantes de Ingeniería (CEEIN), co-fundó el Colectivo Feminista y también Biohuella. Al año siguiente, se unió a la Federación: “Ha sido de mucha ayuda el haber participado en organizaciones estudiantiles. Yo siempre digo que es lo que más me ha enseñado la UAI: participar de estas actividades, reuniones con compañeros/as, compartir ideas y proyectos, llegar a acuerdos. Es súper importante para la vida universitaria”, dice la entrevistada.
Respecto a los aprendizajes como representante estudiantil, la alumna explica que “el trato con las personas, entender que hay distintos puntos de vista, decir mis ideas de manera coherente y el liderazgo de poder dar mi opinión fue lo que más me ha ayudado para Winds of Change”.
El proyecto en el que trabaja la estudiante en estas reuniones binacionales corresponde al diagnóstico de incendios forestales, tanto a nivel mundial como en los países que representan los integrantes del programa. Así, se discute sobre “consecuencias, impactos, lo que provocan y sus medidas de mitigación para después analizar algún patrón que exista en lo anterior. Y luego hacer una infografía clara para presentársela a las autoridades y a la gente corriente que necesite soluciones, especialmente acá en Valparaíso”, dice Villavicencio.
Talleres, actividades y reuniones son parte del programa internacional. Respecto a esto, la entrevistada comenta: “Estoy feliz de poder compartir con personas que tienen las mismas ganas, además que yo puedo aprender mucho de ellos y ellas. Hay tanto que aprender del otro, que me siento muy afortunada de participar”.
“La importancia de estas instancias es tomar desafíos en conjunto desde diferentes perspectivas. Es súper relevante, eso es lo que necesitamos ahora. El problema es general y ataca a todo el mundo por igual. Si colaboramos y en Nueva Zelanda hay algo que funciona y en Chile todavía no se aplica, es demasiado necesario comunicarlo y viceversa”, agrega Villavicencio.
En el futuro, Andrea Villavicencio espera poder viajar a Nueva Zelanda “porque dicen que es muy parecido a Chile y me gustaría verlo. Además, para así poder conocer a la gente con la que he compartido de manera online en esta oportunidad”.
El llamado a la comunidad estudiantil que hace la entrevistada es “a que se atrevan a hacer cosas, a tomar acción en cualquier nivel –en casa, en la U, con amigos/as, con la familia– hay que empezar con algo pequeño y seguirá aumentando como un dominó para el cambio climático y lo que es la preocupación por nuestro entorno”.