Ignacio Contreras reflexiona sobre el primer semestre y cómo se vislumbra el segundo periodo 2020

Todos y todas sabemos lo singular que ha sido este año. Conocemos el impacto que la pandemia del COVID-19 ha ocasionado en nuestras vidas. No ha sido fácil para nadie. Hemos tenido que cambiar la manera de cómo relacionarnos con los otros muy repentinamente, como así también, pasar tiempo en nuestros hogares semanas y semanas, algo inédito para los actuales tiempos.

Sin duda nuestra Universidad no ha sido ajena a todo este fenómeno. Ha tenido que enfrentar este cambio en un corto plazo, con el fin de adaptarse a la nueva forma de entender nuestras vidas, teniendo a la vista uno de los principios fundamentales de nuestro rol formativo, la continuidad del proceso de aprendizaje.

Es así como, a inicios del semestre, la UAI volcó sus clases de Pregrado hacia el mundo virtual. Esta experiencia, la cual sigue vigente, nos desafió como nunca antes había ocurrido. En pocos días todas nuestras clases se realizaban en ZOOM, con profesores explorando nuevas formas de enseñanza, y un estudiantado adecuándose a esta metodología. Luego, ya transcurridas varias semanas, la capacidad de adaptación de nuestra comunidad fue única y destacable. El esfuerzo puesto por todas y todos fue muy valioso para que este sistema de clases a distancia funcione a lo largo del semestre.

La vida universitaria también se trasladó a internet. Hay que destacar que las restricciones de movilidad que se establecieron, como medida de protección sanitaria, no fueron un impedimento para mantenernos conectados y así compartir nuestros intereses. Sorprende saber que muchas de las actividades que los estudiantes regularmente realizan en el campus, se lograron satisfactoriamente: tardes de estudio, talleres extra-programáticos, debates, concursos, trabajos voluntarios, entre otras.

Si bien el aprendizaje alcanzado de la experiencia online ha sido inmenso, creemos que el desafío persiste. Sobre esto, el desarrollo emocional del estudiante se torna fundamental bajo el nuevo contexto en el cual estamos insertos. ¿Cómo lidiar con el sentimiento de aislamiento, frustración, aburrimiento, ansiedad o estrés? Esta tarea debemos seguir abordándola como la comunidad educativa que somos.

Es así como hoy más que nunca nos hace sentido nuestro Modelo Educativo UAI, el cual permite a los y las estudiantes enfrentar un presente marcado por cambios vertiginosos y un futuro que es impredecible y desconocido.

Como Director de Pregrado, no me queda más que desearles mucho éxito para este segundo semestre 2020, del cual la única certeza que tenemos es que estará lleno de aprendizajes y nuevas experiencias. Cuenten con nosotros y nosotras para apoyarse, a través de la Secretaría Académica, la DAE, entre otros.

Si necesitas contactarte a la UAI, aquí puedes conocer las principales vías de comunicación.

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